El Getafe cayó ante el Espanyol en un duelo marcado por un inicio no apto para cardíacos. Joselu hizo el 0-1 a los 5 minutos de juego con un tiro desde el centro del campo. Aún resonaban en la televisión los ecos del tanto cuando Enes Ünal anotó un gol todavía mejor con un derechazo a la escuadra de la meta de Álvaro. El empate volvía a colocar el encuentro en el punto de partida. Lejos de apaciguarse el choque multiplicó la vertiginosidad. Ocasiones por uno y otro lado durante toda la primera parte, hasta que ambos conjuntos enfilaron el túnel de vestuarios.
Al inicio de la segunda mitad los ánimos se templaron. Quique Sánchez Flores metió cambios. Juan Iglesias, Gastón y Munir entraron al terreno de juego por Aleñá, Alderete y Damián Súarez. La calma inicial duró hasta que Puado anotó el 1-2 tras una acción personal. El Getafe dio un paso más al frente para tratar de dar la vuelta al marcador. Latasa y Gonzalo Villar, en su vuelta al Coliseum, salieron para quemar las naves. Los visitantes, ya más pendientes de controlar las contras y despejar los centros laterales. Los tres delanteros llevaban peligro, pero sin opciones de cara a portería. Derrota inmerecida, ya pensando en la visita en el Camp Nou.
