“El mensaje que transmito a mis jugadores es que estamos en la jornada 28 y lo que cuenta es dónde estemos en la 38”, recordaba Bordalás en sala de prensa en la previa ante el Leganés.
Y es que el Getafe sabe que ahora mismo se enfrenta a lo más importante de la temporada, que quedan muchas jornadas, diez, y que no se puede tener euforias. El técnico azulón incidía en que solo hay que pensar en el siguiente partido, y eso pasa por pensar en el Leganés, “no podemos ser ajenos a la importancia de un derbi, no dejan de ser tres puntos más, pero sabiendo que existe una rivalidad sana. Ellos son un buen equipo, nos vamos a enfrentar a un magnífico rival, con un entrenador excelente, que ha armado un equipo sin fisuras. Defiende con mucho orden y con muchas posibilidades ofensivas”.